Soy únicamente Sonia.

Soy ridícula y me da igual. Escandalosa. La gente se gira por la calle para mirar mi forma de andar, de colocar mi cuerpo, de gesticular, de hablar, de expresarme con movimientos de las manos, para fijarse en la expresividad de mis ojos y, en general, para ver lo fea que soy. Si algo me hace gracia, me río sin preocuparme si molesto a alguien, me río a carcajada limpia, y me da igual. Soy feliz (momento efímero). Si cuento algo, lo cuento con una actuación. Canto a todas horas. Lloro más que respiro. Me hace feliz nada, y a veces me hace triste tener todo. Nunca me conformo, siempre, siempre aspiro a más (aunque pocas veces lo consiga). Intento que la gente se ría y sea feliz, aunque la risa la provoquen mis tonterías. Me siento libre sólo cuando estoy en blanco, en vacío y, de forma abstracta, con alguien. Lo peor que llevo es sentirme sola rodeada de gente. Me puede la música, en general… Me gusta leer cosas reales, aunque concluya que son imposibles. Me gusta ver en las películas que todo pasa…y me gusta escribir lo que siento para que todo quede… Me gusta poder pensar que algún día podré hacer que otro sienta lo que yo sentí cuando escribía unos versos, o unas líneas… Con gente me encuentro rara, si no es gente que me entienda realmente. Sola… soy…